Ricardo Buryaile – “Las medidas de Insfrán son más de lo mismo”
Ante el aumento de casos de coronavirus, las autoridades de Formosa cerraron la capital provincial por 14 días y volvieron a imponer allí la fase uno de aislamiento, lo que implica la suspensión de todas las flexibilizaciones que habían habilitado. Frente a la decisión adoptada por el gobernador Insfrán, sectores de la oposición salieron a manifestar su rechazo a la medida.
El diputado nacional Ricardo Buryaile, expresó que “el Estado nacional y las provincias establecieron una cuarentena que permitiría ordenar el sistema de salud para atender a las consecuencias de la pandemia”. Y agregó: “hoy, a casi 12 meses, en nuestra provincia la única receta que pareciera tener el gobierno provincial y que se aplica sistemáticamente es el aislamiento de los ciudadanos. Se trata de más de lo mismo”.
Buryaile sostiene que la salida y la forma de enfrentar el coronavirus con éxito es a través de la vacuna, “que, con una muy mala gestión del gobierno nacional, no llega a la nación ni a las provincias”, afirmó diputado.
La ciudad de Formosa ante 17 casos, sobre una población de más de 350 mil habitantes, vuelve adoptar medidas restrictivas. “Vuelve a fase uno, y los trabajadores del sector público deben ir a trabajar, mientras que los del sector privado no pueden hacerlo”, aclaró Buryaile.
Para el ex ministro de Agroindustria de la nación, las consecuencias económicas del sector privado son irreparables. “Cientos de restaurantes, bares, hoteles, gimnasios, entraron en quiebra. A esto se le suma, la pérdida de los puestos de trabajo, la desaparición del sector privado es inexorable” asintió con preocupación. Y aseguró que la solución no es volver todo a fase uno, “la solución, mientras no esté la vacuna, es la responsabilidad social, el trabajo mediante protocolos y que el sistema de salud este pronto para atender las consecuencias de la pandemia”, dijo Buryaile.
Finalmente aseguró que se debe hacer hincapié en el sistema de salud. “El aislamiento y las cuarentenas no eran para que fueran eternas, sino para preparar los sistemas de salud”, dijo Buryaile. A un año de eso, “todavía seguimos con el único remedio del aislamiento obligatorio. Mientras que las vacunas brillan por su ausencia. El Gobierno nacional había prometido que a esta altura tendríamos 20 o 30 millones de vacunas a esta altura, y solo tenemos hasta ahora un millón”, fustigó.